miércoles, 17 de febrero de 2016

Mareos.

Cambiemos la manera en que resuenas en mis pensamientos o instalemos otras palabras que te representen, siempre tu, siempre yo, pero diferentes. Porque mis manos no alcanzan las tuyas, porque no corremos tras los mismos fines y dibujamos el color del cielo en una servilleta. Estoy cocinando pastel de queso, mientras trabajo y veo por el picaporte un poco de tu mundo. Celebro con mi voz entrecortada la facilidad que es apoderarnos de nuestros sentimientos, quien diría que podríamos hacer latir el corazón a nuestro antojo. Encuentro satisfacción a mis emociones justo antes de irme a dormir, mi almohada soporta todas las expectativas y cultiva conmigo esperanzas, una vez mas.. Te escuchas diferentes en las canciones y por dentro el olor a ti me marea.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Pensar.

No se escuchaba nada más que sus dientes rechinando, los pensamientos se desplazaban por su cabeza como lava ardiente y entre las comisuras de sus labios se formaban montículos de polvo. Intentaba correr, pero pequeños insectos había picoteado sus intenciones hasta llenarlas de pústulas. Los guerreros estaban cansados y cada batallón estaba haciendo lo propio, retirar banderas y regresar abatidos hacia su lugar, algún pensamiento pasado era encargado de acoger a aquellos pequeños ahora sin qué hacer. Prefería pensar que era batalla perdida y que ahora solo tenía que soportar dos o tres meses más, después la corriente de agua y la primavera harían lo suyo. llevarse todo lo que el invierno dejó y regresar flores nuevas. ¿Será buen momento para un embarazo?, ¿qué haré de comer hoy?, cómo se compone el acorde mayor de sol...

miércoles, 3 de febrero de 2016

Formas.

Quisiera que dejaras de verme de esa forma, regresar las palabras y quizá si es posible el tiempo. No necesito sentirte cerca para recibir tus culpas. Me disparas cerca de los ojos al despertar, resucitas el desprecio por todo lo que habías conocido, soy la aberración de tus sentidos, el peor de tus sueños. Me agazapo entre tus pensamientos para darte un golpe en el estómago cuando crees sentirte mejor. Araño cada uno de tus intentos de seguir adelante y me detestas. siento tu toxicidad y tu, claro, sientes mi veneno. Lastimamos nuestros recuerdos, sentimos como va creciendo la mala hierba en cada caminata juntos, se nubla y la porquería huele a ti y también huele a mi. Nos convertimos en asesinos constantes, imaginamos cómo cometer el crimen y saboreamos la sangre y la venganza hace que nuestra sonrisa aparezca. El odio se disfraza de olvido a veces y por momentos parece no importar. puede que vislumbremos la paz, pero hay ácidos que no se disuelven con la lluvia, seguimos incrustándonos en el asfalto y la luna parece brillar. No me veas más de esa forma, respira, no soy tu enemigo, somos un camino.