jueves, 11 de agosto de 2011

Búsqueda.

Hay cosas que no se deben prometer, a mi parecer; el amor, y la eternidad. No se prometen porque si estas dispuesto a brindarlo, creo, no importarán las promesas ni nada. Hoy leí una hermosa frase que decía algo como "Si una persona realmente quiere verte, hace todo lo posible para llegar a ti" - Sin miedos, sin excusas." Bueno que eso sì se puede prometer, hacer todo lo posible por conseguir el amor, o ve tu a saber qué; la oportunidad.

Entonces me quedo viendo todo lo que implica tomar esas decisiones, y las largas filas, costos, horas, y demás menesteres poco románticos que deben de ponerse a prueba por conseguir lo que tanto se quiere. No sé que le pase al mundo, ni sé porque todo se vuelve tan lejano. Pero no me espero sentada a que las cosas se acomoden, veré la forma de obtener lo que tanto deseo, de alguna manera.

Y hoy, en búsqueda de esa oportunidad me encuentro.

3 comentarios:

  1. Pero las largas filas, los costos y las horas son imperceptibles cuando te encuentras bajo los efectos del amor, es como aquella frase que dice “a esos dos, ni la lluvia les hace”, curioso es que no la entiendes hasta que en efecto estás bajo la lluvia sin sentirla, lindo ¿no? En lo personal pienso que el amor es como el alcohol (y creo que ya alguna vez hablaste de esto en tu blog) definitivamente cuando estás ebrio de amor/alcohol te sientes de maravilla, lo malo es, la vuelta a la realidad, y no precisamente por el miedo a la cruda (eso en realidad sería catastrófico), de la cual alguna vez leí que “solo existen dos formas de evitar la resaca, dejar de beber o mantenerse borracho”… ¿existirá alguna forma de estar ebrio de por vida... de amor o de alcohol?

    Buen día.

    ResponderEliminar
  2. Creo que es cuando mezclas la (no) promesa de amor y de eternidad para convertirse en "amor eterno"

    ResponderEliminar
  3. Así es Robe, la cosa es muy simple, creo yo. Pues, no hay mejor manera de hacer "estupideces" (y hablo de esas lindas). Que estar enamorado, como ir a bucar el amor a kilomeros, horas y dificultades. Sin importar mucho lo que nos espere por allá, si es un abrazo, o una simple palmada en la espalda. El chiste, creo yo, es arriesgarnos. Y ese es un ejemplo de las cosas que se pueden hacer por amor, que para muestra basta un botón o varios. Ya nos sabemos un par de historias.

    Gracias por comentar, y por siempre leerme. Beso.

    ResponderEliminar