jueves, 21 de julio de 2011

Arañas.

Lo vi, pero no lo vi. Debe de ser algo de la conciencia. Pero, las calamidades surgen como pequeñas polillas que no parecen del todo caóticas, hasta que terminan por almorzase a su presa, sin que ésta pueda poner resistencia. Era el sexto mes, el octavo día, a una hora poco prudente cuando recibí la llamada.

En el otro lado del telefono, con voz poco confiable, se encontraba un sujeto con temperamento tan parecido a una aceituna que podría sentirse lo agrio en su voz. "he decidido dejarte". Inmovil frente al televisor apagado, un par de libros cerrados y mi cena fría, me encontré varios minutos inspeccionando si la voz era realmente aquella que me lanzaba flores, o era simplemente un número equivocado. Temblorosa y con algo de ardor en los ojos, me senté frente a la computadora, hurgue en mi correo electronico, y en otras palabras, lo mismo. "No volveré a buscarte".

Hacía bien en no volver a buscarme, las cosas se habían disuelto con el pasar de los días, las semanas y la lluvia. De todo aquello nada había quedado, quizá cascarones inertes, y un olor desagradable. En mi piel, cicatrices, en mis ojos nada. Debiste verme aquella tarde de enero, o tal vez si me viste y decidiste voltear hacía otro lado, no importa.

Te perdono, me perdono, y lo perdono. Las constelaciones de circunstancias explotaron en mi cielo, y sin importar lo que hubieras hecho, el destino estaba escrito. Tu no estarías conmigo y yo me iría lejos. Seguí buscando rastros de ti en la bandeja de entrada, y me encontré con muertos y zombies, y alguna que otra araña que tenían tu nombre.

Vemos hacía otro lado y tu frío como siempre, me contestas como si fuera un memorando.Sinceramente no me importaba. Sólo acariciaba el teclado intentando contestar algo, pero mis letras callaron, y mi indiferencia me hacía quedar pasiva. Te había olvidado.

3 comentarios:

  1. Me he quedado realmente intrigado con lo de la Arana que lleva tu nombre".
    Por lo demás, he podido reconocer y recordar ese momento de televisor apagado cena fría y la mirada perdida en un vacío que parece llevarlo todo. Los elementos siempre difieren, pero el sentimiento es el mismo.

    No me canso de leerte, siempre me sorprendes y siempre me atrapaste. Nunca tengo bastante de ti.
    Un beso.

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  2. Y yo no me canso de que me leas Unai. Y bueno eso de las arañas, supongo, que vino a mi mente como, cuando se escribe el nombre al final, como la firma, algo así. ;)

    Besos muchos y un abrazo cariño!

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  3. Wow.. si que me hiciste como.. poner la piel chinita con tu texto, me gusta por que lo que eh leido de ti es siempre refrescante, y siempre hay algo que suena o es conocido, que es delicioso recordarlo en tus letras. Muy buena entrada :)

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