lunes, 15 de febrero de 2010

Buenas noticias.

Un día cualquiera, como éste, llegaran sin pensar las noticias y correré a escucharlas y sentiré un gran alivio; tal vez un día como cualquier otro, ya sea de noche o de mañana, en la tarde o medio día, o porqué no de madrugada, emergerán de alguna parte, y mis oídos, mi boca, y claro está mi corazón no podrán con la emoción, y saborearé las buenas nuevas.

Al final de cuentas esa es una buena noticia, saber que tal vez un día sin pensarlo, estarán aquí y dirán mi nombre y quizá el tuyo, y reconoceré el momento y sabré que decir y qué hacer. Mientras tanto sé que dentro de todo ésta noticia tuya es buena. Siempre es bueno saberte respirar en alguna parte, escuchar tus pasos, entender tus ojos.

Y bombardearé las nubes con mi risa; y estallaré en abrazos en tu espalda; si ta sólo un día cualquiera sin pensarlo siquiera una noticia tuya llega a sorprenderme y me hace saber que sigo viva y tu sigues igual, bien viva; qué tal vez mi palabra y la melancolía alcanzaron los kilómetros y los meses como fuego se expandieron por los valles.

Dices que es mayo, qué será la fecha, yo siento que tus mensajes, aún cuando sean cualquier día, siempre serán buenas noticias.

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