miércoles, 27 de enero de 2010

Finales Alternativos."En Primavera"

Sigo jugando con finales, he pensando, que sería divertido jugar con el matiz de los finales; es decir, poder darle finales rosas y grises o verdes a ésta historia. Es, creo, lo más hermoso de escribir, uno puede hacer su propio mundo, más allá de lo que dicté la vida real. Yo soy la voluntad de todos los personajes, yo elijo como se mueve cada pieza.

Era primavera, la ciudad empezaba a vestir nuevas ropas, el calor y el frío había hecho las paces y se compartían las horas del día. Ese día todo parecía normal en la vida de aquellos de los que tanto les he hablado; sus tareas se habían convertido en rutinas agradables, aunque algo pesadas. Se habían llenado la vida de "cosas" y eso mantenía ala mente ocupada y relajada. Él pensaba en ella algunas veces, casi siempre justo antes de dormir, o cuando sacaba del cajón un suéter verde que ella le había comprado en navidad, leía de vez en cuando sus cartas y suspiraba con el recuerdo de días más grises. Ella, había intentado borrarlo por completo, su corazón pretendía estar ocupado de nuevo. Todavía se preguntaba de dónde había sacado tanta fuerza para tomar esa decisión; pero las cosas no iban tan mal; pensaba en él casi todos los días, pero no lo decía, había decidido guardar silencio, era más cómodo.

Él había pensando mucho en ella esa semana, le empezaba a parecer absurdo caminar por la calle sin que ella sujetara su mano, las platicas con sus amigos eran rápidas, pálidas y pocas veces les ponía atención; el ruido sin su voz era como sólo un golpe de tambor sin sentido que le taladraba los tímpanos. No entendía que mágica aura había sostenido sus momentos a lado de ella, no comprendía como las horas podían pasar como suaves segundos. Su piel extrañaba esas manos que acariciaban cada rastro de piel. Y ni qué decir de la añoranza de su abrazo, se podía imaginar sus brazos rodeando su cintura, la respiración de ella en su oído y sus latidos, esos que representaban a los mismos de un colibrí, cada vez que él se le acercaba. No quedaba duda, ella lo había amado muchísimo, -Seguiría haciéndolo?-. Los errores les habían bombardeado la vida, estaba consciente. Pero no veía nada imposible, no cuando su cuerpo parecía sólo una masa caminando sin las manos de ella que le dieran forma; no cuando su corazón, había caído en una rutina, incluso más cansada que a la que había condenado a su mente.

Esa tarde decidió ir a buscarla, no lo pensó dos veces, y antes de darse cuenta se encontraba dando vuelta en la calle donde ella vivía. No le había avisado, quizá pensó que estaría esperándolo. Tocó a la puerta y un gran ruido que le resultaba todavía familiar lo mareó. No abría ella, era otra persona; no se había fijado si su carro estaba fuera de la casa, pero ya era tarde para voltear y buscarlo. Preguntó por ella, y de la sombra una figura le dio paz al momento, era ella.

Estaban justo uno enfrente de otro, pero no se dijeron nada. Otra sombra interrumpía la escena.

1 comentario:

  1. Cómo????... era el otro, la sombra era el otro????.... !!!

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